Microsoft, Apple y Google mantienen desde hace años una gran lucha para hacer llegar sus productos y servicios a la gente. La competencia hace que los usuarios disfrutemos de más y mejores aplicaciones, pero en ocasiones empresas de semejante envergadura tienen que luchar en el mismo bando. Según Reuters, Microsoft puso una demanda contra el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Esto sucedía en abril, en relación con la controversia de las solicitudes de datos personales. El gobierno estadounidense puede pedir información a las empresas sobre algunos de sus usuarios evitando informarles de que estaban siendo investigados. Apple, Google, Amazon, la Cámara de Comercio de Estados Unidos, la Fundación Electronic Frontier y muchos otros han mostrado su apoyo a la iniciativa de Microsoft.
Los de Redmond recibían miles de solicitudes para recabar información sobre sus clientes sin que estos pudiesen informarles, algo que va en contra del objetivo de Microsoft de proteger la privacidad y los derechos de sus usuarios. El factor decisivo en la demanda será ver si la ley actual viola o no la cuarta enmienda a la carta magna estadounidense.
El derecho de los habitantes de que sus personas, domicilios, papeles y efectos se hallen a salvo de pesquisas y aprehensiones arbitrarias, será inviolable, y no se expedirán al efecto mandamientos que no se apoyen en un motivo verosímil, estén corroborados mediante juramento o protesta y describan con particularidad el lugar que deba ser registrado y las personas o cosas que han de ser detenidas o embargadas.
Este caso es sólo la última de una larga lista de batallas entre empresas, grupos de defensa de privacidad y el gobierno estadounidense, que tratan de mantener una suerte de frontera digital. En ambos bandos hay buenos y malos argumentos, pero Microsoft se ha decidido con fuerza por uno de estos lados. Tendremos que ver cómo termina todo y cómo será nuestra privacidad como consecuencia en el futuro.
