(Parte 1) Si los usuarios que son nativos digitales no son capaces de aprender usando esas tecnologías como bien nos indica César en su diálogo, no pienso que el problema esté en las TIC sino en cómo se aprende. La comunicación nos ha llevado, en la actualidad, a no ser capaces de asimilar todos los cambios que nos llegan, y lo estamos observando día a día en las noticias, soluciones como la que recientemente intenta plantear Hungría de cobrar por cada Gb descargado o el más reciente canon AEDE que estamos sufriendo en nuestras propias carnes sólo son el comienzo de una serie de resultados catastróficos a los que nos está llevando el mundo de hoy, un mundo de hoy que no se va a cambiar pensando como hoy, un mundo que trata de adelantarse a los cambios del mañana.
Me gustaría hacer un apunte de la indicación de César “Poner énfasis en el uso de la tecnología y no en la tecnología”, creo que es una afirmación que intenta centrar el foco de visión en un sólo punto de este maravilloso mundo el cual nos dejaría con usuarios que bien podrían conocer los usos pero no de dónde vienen y, al igual que ocurre en otras enseñanzas como las matemáticas y la historia, lo importante no es saber, sino comprender y de la comprensión viene la sabiduría. Tanto el cómo como el qué deben de tener la misma importancia en la tecnología y más debemos de ser raudos y aprovechar que es algo “nuevo” porque lo que hoy es nuevo mañana será viejo y el uso de hoy desde luego no será el uso del mañana y no sólo los usuarios deben de saber hacer uso de algo, sino comprender los cambios que ocurren en ese algo, no estamos hablando de una materia sencilla, sean posiblemente los mayores cambios que ha sufrido la humanidad en su historia con unas consecuencias que no podemos prever por lo que es y debe ser adecuado instar a los usuarios a querer aprender el por qué y no solo el cómo.
Debemos de ser conscientes que los cambios van a llegar, y van a llegar de un lugar que aun ni existe. En el discurso de César nos hablan de un futuro que se plantea como un ligero cambio a la realidad de hoy, cuando va a ser un cambio brutal que ni podemos imaginar, todos tratan a las TIC como algo que se debe de enseñar de la misma forma que se enseña a sumar y restar, es normal, no hemos nacido con ello y por muchos años que llevemos estudiándolas seguiremos considerándolas como algo en lo que fijarse de forma individual. Dejemos de hablar de TIC para hablar de educación, dejemos de mirar un solo punto para abarcar el amplio espectro de posibilidades conocidas y desconocidas a las que nos enfrentamos actualmente. El ordenador de hoy es el lápiz de ayer y el (introduzca aquí su aplicación de mensajería favorita) es el teléfono nuestro. Siempre las revoluciones han sido tratadas de forma individual para acabar descubriendo que cuando las entendemos simplemente están allí, y por ese motivo, de la misma forma que César comenzó hablando de forma magistral del valor de “una información” que siempre ha estado ahí, acaba indicando que la mejor forma de acolcharnos frente a cambios que no conocemos es formar al docente de hoy para que comprenda, y no para que entienda, que las TIC no son algo a parte de la educación, sino que son la educación y como tal no deben tratarse en sentido individual, sino en sentido total de un conjunto.
Si os ha gustado podéis dejarme vuestra opinión en los comentarios. También podéis seguirme en Twitter: @PabloGuija
