Hace unos meses salió a la luz un proyecto de Microsoft llamado DeLorean, os lo contamos aquí, este sistema renderizaba los frames antes de que ocurrieran en el juego consiguiendo una latencia de 250ms. Un número bastante decente para un software que se está ejecutando en la nube.
Este proyecto ha sido renombrado como Outatime, como bien informan los chicos de Neowin. Pero en un nuevo documento, vemos que Microsoft está trabajando para mejorar el juego móvil trasladando trabajo desde la GPU hasta la nube. El proyecto actualmente se llama Kahawai y utiliza dos técnicas diferentes para el renderizado colaborativo entre GPU y cloud.
La primera forma es que el dispositivo móvil puedan renderizar cada frame con una calidad reducida y que la nube nos otorgue los deltas entre la baja calidad y la alta calidad de renderizado para mejorar la calidad general de los frames. La segunda técnica es que el dispositivo móvil renderiza un subconjunto menor de frames mientras que la nube nos proporciona los frames perdidos aumentanto así la calidad general de la imagen.
Estas dos técnicas que están siendo desarrolladas por la gente de Redmond son compatibles con los decodificadores H.264 que hoy en día montan los smartphones más nuevos. Lo que nos hace pensar que esta nueva tecnología pueda ser aplicada en un futuro no muy lejano y funcione con los terminales que se están vendiendo a día de hoy, haciendo de nuestros teléfonos unas auténticas máquinas de juegos.
Nuestro dispositivo móvil hace la mayoría de trabajo, por lo que la anchura de banda usada es tan solo una parte de dieciséis de otros servicios ligeros de streaming. Para activar esta función, solamente es requerido el código fuente para el motor del juego, si este código no es proporcionado, Kahawai puede hacer parte del trabajo pero con mucho menos rendimiento, como es obvio.
La fecha de llegada no es proporcionada en ese documento, pero parece que tienen la tecnología bastante depurada y probada en teléfonos actuales. Sin duda sería el salto definitivo al concepto de juego en el teléfono, poder mover juegos muchos más pesados que ahora y con una buena calidad está más cerca que nunca.
