La última parte del desarrollo de los sistemas operativos de Microsoft siempre se centra en el diseño, y a menos de un mes del lanzamiento oficial de Windows 10, los chicos de Redmond ya se han empezado a centrar en el apartado gráfico del nuevo sistema operativo.
Desde Windows XP hasta Windows 7, la pantalla de inicio de sesión incluía una imagen de fondo predeterminada que era un distintivo del sistema operativo. En Windows 8 y Windows 8.1 esta imagen fue sustituida por el color sólido del tema que hubiésemos elegido para la personalización de nuestro dispositivo.
Ahora, con Windows 10, Microsoft nos muestra la que será la imagen distintiva del sistema operativo que verá la luz el día 29 de julio. Ya se filtró como fondo de escritorio la nueva imagen con el logotipo de Windows desprendiendo una especie de halo de luz, y ese será el fondo elegido por Microsoft para nuestra pantalla de inicio de sesión.
Recordemos, que con la Build 10159 de Windows 10 Insider Preview, también llegaron 300 correcciones de errores, lo que sitúa a Microsoft en la pista de despegue para el lanzamiento de Windows 10. Ya estamos viendo como, en comparación con las primeras compilaciones que aparecieron, el nuevo sistema operativo comienza a ser mucho más estable.
Desconocemos si se podrá cambiar la imagen de la pantalla de inicio de sesión desde el apartado de personalización del sistema operativo cuando llegue la versión final o en próximas builds, o si será necesario recurrir a herramientas de terceros para realizar dichos cambios como ya ocurría en Windows 7 con software como TuneUp Utilities.
