Así queda el Lumia 950 XL frente a sus rivales

Hace unas horas poníamos al nuevo Lumia 950 contra sus rivales más acérrimos en la gama alta, y ahora vamos a comparar a su hermano mayor, el 950 XL, con los terminales más exigentes de la gama alta actual. El nuevo buque insignia de Microsoft llega con grandes características en el apartado de hardware y a nivel de software, por lo que si yo dirigiese Apple o Samsung echaría a temblar.

Para comprobar cómo queda el segmento de los phablets de gama alta vamos a poner frente a frente al Microsoft Lumia 950 XL con el Samsung Galaxy S6 Edge+ y el iPhone 6S Plus, y comentaremos de forma detallada los resultados por apartados de cada comparativa. ¡Qué gane el mejor!

Microsoft Lumia 950 XL vs Samsung Galaxy S6 Edge+

A simple vista, cualquiera diría que el Microsoft Lumia 950 es un calco mejorado del terminal presentado por la empresa surcoreana. En pantalla, descontando el detalle de que en el Galaxy S6 Edge+ tiene los bordes curvados, en especificaciones técnicas son idénticas. Otro aspecto donde se nota que el terminal de Samsung suprime los marcos es en la anchura del terminal, donde el Lumia 950 XL es alrededor de 3 mm mayor.

En cuanto a capacidad de procesamiento, el phablet de Samsung cuenta con el procesador Exynos 4720 fabricado por la propia compañía con la particularidad de que cuatro de sus núcleos funcionan a 2,1 GHz y los otros cuatros a 1,5 GHz. Mientras tanto, el Lumia 950 XL cuenta con un Snapdragon 810 de 8 núcleos a 2 GHz, por lo que el procesador de Qualcomm es algo superior al respecto.

En el apartado de almacenamiento interno y memoria RAM, Samsung gana la partida, aunque con matices. En el Galaxy S6 Edge+ encontramos una variante de 64 GB, superando los 32 del Lumia 950 XL, pero en el dispositivo de la pantalla curvada no podremos ampliar la memoria con tarjetas microSD, opción que sí tiene el Lumia admitiendo tarjetas de hasta 2 TB.

La memoria RAM es superior en 1 GB en el smartphone de Samsung, aunque esto es debido a la necesidad de este hardware para mover Android y TouchWiz, más que para sacar músculo en este aspecto frente a la competencia. De esta forma, el Galaxy S6 Edge+ cuenta con 4 GB y el Lumia 950 XL con 3 GB.

No nos olvidamos de los asiduos a la fotografía, donde gana con clara superioridad el dispositivo de Microsoft. Aunque son prácticamente iguales en tamaño del sensor e idénticas en apertura focal, el Lumia 950 XL creará fotografías de mayor resolución gracias a sus 20 megapíxeles. Además, en fotografía nocturna gana enteros el phablet de los estadounidenses con un flash natural RGB triple LED que captura los colores con mayor fidelidad.

La batería durará varias horas más en el smartphone Lumia gracias a sus 340 mAh extras en comparación con la del Galaxy y a la optimización de la gestión de la batería de Windows 10 Mobile. En el apartado de conectividad destaca en el 950 XL el puerto USB-C, que permite habilitar las posibilidades de Continuum siempre que adquiramos el Microsoft Display Dock.

En cuanto a dimensiones y peso, pese a tener la misma diagonal, el Galaxy S6 Edge+ es más delgado y menos ancho, mientras que el Lumia 950 XL tiene menos longitud de altura. Las principales razones para que esto sea así son la pantalla curvada del dispositivo Samsung, y la supresión de los botones capacitivos y el hardware de cámara que utiliza el dispositivo de Microsoft.

La seguridad es muy valorada en los terminales de gama alta. El terminal con Android apuesta por un lector de huellas para permitir el desbloqueo del dispositivo, mientras que el nuevo smartphone con Windows 10 Mobile hace uso de su escáner de iris y Windows Hello para la misma función, aunque también será utilizable en aplicaciones y otros servicios de sistema operativo.

Microsoft Lumia 950 XL vs iPhone 6S Plus

Sin duda alguna, el Microsoft Lumia 950 XL se postula como un auténtico Apple killer. El primer apartado donde el iPhone muerde el polvo es en la pantalla, pese a ser 0,2 pulgadas menor, el teléfono de la manzana cuenta con la mitad de resolución, lo que supone una diferencia de más de 100 píxeles por pulgada. Microsoft ha apostado por la tecnología AMOLED, mientras que Apple ha preferido ser continuista y utilizar IPS LCD, aunque en este aspecto se suele decir que «para gustos, los colores».

El procesador del iPhone 6S Plus es el Apple A9, diseñado por los de Cupertino, con doble núcleo a una frecuencia de reloj de 1,84 GHz. Microsoft continúa con su apuesta por Qualcomm con el Snapdragon 810 octa-core a 2 GHz, lo que supone que a simple vista el dispositivo de la manzana quede bastante por detrás. Debemos aclarar en este apartado que el iPhone 6S Plus cuenta con iOS 9, un sistema operativo totalmente optimizado al hardware de su smartphone, aunque Windows 10 Mobile también está bastante optimizado, realmente la potencia del Snapdragon será visible en su uso con Continuum.

Un gran error que se criticó a Apple ha sido sacar este iPhone con unas capacidades de 16, 64 y 128 GB, saltándose el estándar medio que en la industria está fijado para la gama alta en los 32 GB. Esto sí lo ha cumplido Microsoft, a cuyo dispositivo además se le puede ampliar el almacenamiento mediante tarjetas microSD. En unos dispositivos que pueden grabar vídeo a resolución 4K, esto puede marcar la diferencia.

Con la memoria RAM de ambos terminales sucede como con el procesador, en el iPhone tenemos a su sistema operativo optimizado para funcionar con 2 GB de memoria RAM, y aunque Windows 10 Mobile pueda funcionar en hasta dispositivos de 512 MB de RAM, los 3 GB del Lumia 950 XL se antojan necesarios para su funcionamiento con interfaz de escritorio, teclado y ratón gracias a Continuum for Phones.

En el aspecto fotográfico, el iPhone 6S Plus se encuentra con un problema similar al que tiene el Galaxy S6 Edge+ para rivalizar con el Lumia 950 XL. Además de tener una apertura focal mayor, el smartphone de Microsoft cuenta con su triple flash LED que captura los colores de forma más nítida, haciendo que nos olvidemos de las personas que aparecían totalmente blancas a causa del doble flash LED.

Ambos terminales se encuentran con una batería acorde al hardware que utilizan, pese a que el iPhone tiene casi 600 mAh menos de capacidad que el Lumia, debemos recordar que cuenta con la mitad de resolución de pantalla y un procesador de doble núcleo. El terminal de Apple es más alto y menos ancho debido a las proporciones de diseño utilizadas por la empresa de Cupertino, y a su vez es más pesado debido a su tecnología 3D Touch utilizada en pantalla, que requiere de un cristal más duro y grueso.

En el apartado de conectividad, el iPhone 6S Plus continúa utilizando el conector propietario de Apple llamado Lightning para acelerar la carga y mantener control sobre los accesorios, mientras que Microsoft pasa de utilizar microUSB a USB-C, habilitando las características de Continuum con ese hardware y Windows 10 Mobile.

La baza de la empresa de la manzana con su iPhone es la tecnología 3D Touch, que te permite habilitar ciertas características en las aplicaciones o sus iconos en función de la fuerza con la que se presiona la pantalla, mientras que en el caso de la empresa de Redmond es Continuum, que permite conectar el smartphone a una pantalla, un teclado y un ratón para utilizarlo como si de un PC se tratase.